Hace unos días bromeaba con mi chica al ver la edición que habían hecho de un reportaje mío en una revista del mes de octubre. Yo decía que no habían seleccionado las mejores fotos para el papel y que era una pena y ella bromeaba con que eso lo decían todos los fotógrafos al ver su trabajo en los medios. No es broma, es así, de hecho yo lo pondré en mi urna funeraria. Está decidido. La verdad es que muchas veces me he encontrado con ese problema al ver mis fotos publicadas. Nunca he llegado a entender qué se les pasa por la cabeza a determinados editores gráficos, aparte de muchísimo trabajo y que muchos de ellos son meros maquetadotes sin una noción real de imagen. Pero eso es otra historia. El fotógrafo mima su trabajo, lo retoca, piensa sobre las fotos que quiere y así lo hace saber. Muchas veces hace click y descubre que esa es la foto que quiere, ese momento mágico que te hace sonreír y pensar que lo tienes. Es cuando te sientes un gigante de tres metros y ves el mundo como con un carrete de Fuji. Cuando ves tu trabajo impreso y no es lo que habías imaginado (esa foto de apertura fantástica…) no puedes más que desilusionarte. ¿Qué ha pasado? Nada. Otro ha mirado tu trabajo por arriba. Y seguro que no es que yo no tenga una mirada de editor, con el tiempo y muchas horas sentado junto a Miguel Gener o Maemi Amigo o Mamen, de El País, he aprendido a componer portadas con cabeza, a combinar páginas y colocar lo mejor de mi trabajo. Es más, a descubrir joyas que no había visto dentro de un reportaje. ¿Qué falla? No lo sé pero es una pena ver cómo se pierden esas imágenes que no se merecen el olvido. A veces me he sentado a editar el trabajo de los demás. Eso es mucho más fácil, pero cuando veo una gran foto la identifico y lucho por ella como he visto luchar a algún editor gráfico, lucho por levantar un reportaje y hacerlo grande como se merece. Es curioso, ahora que pienso, los mejores editores gráficos con los que he coincidido han sido y son fotógrafos. Va a ser que lo de ser cocinero antes que fraile es algo más que un dicho.
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Mil veces has comentado esas cosas jeje, la indignacion de cada dia, hace poco discutia sobre lo que es arte y lo que no..y una amiga que no desarrollaba ningun arte(pintura,ilustracion..foto¿?) pero que tenia la carrera de historia del arte y un master de noseque vinculado a las galerias y demas, decia que nada es arte sin que un experto en arte(es decir ella) dijera si es o no es. Es algo parecido a lo que planteas tu, cuando dices que los mejores editores graficos con los que has coincidido hayan sido o sean fotografos. En fin, es un debate, aunque para ambos sea blanco y en botella jajaja
ResponderEliminarSí, hay que tener las cosas claras para poder opinar, el problema es que quien piensa que las tiene ni se acerca remotamente a ello.
ResponderEliminarCoincido al 100% contigo
ResponderEliminarun saludo
felipe