domingo, 27 de diciembre de 2009

solo hay que querer ver

A veces una foto solo es sentarse y mirar, querer ver. Te paras un momento quieto y está ahí, en este momento no desperdicies tu tiempo pensando dispara y luego calla.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Rockdelux nº279 Diciembre 2009

A veces la creación de una portada es simplemente casual. Hay días que preparas tus sesiones un poco, buscas como explotar las limitaciones del espacio-tiempo y has dormido un poquito. Hay veces que te encuentras, contra todo pronóstico, con todo de cara y lo aprovechas. Hay veces en las que pensar un poco antes te da ventajas. Tenía unos 10 minutos, en un hall de un hotel, con un tipo feo, poco aseado y desganado, aunque participativo. El resultado, contra todo pronóstico, fueron unas seis fotos muy cañeras con las que estoy encantado. Jamás pensé que sería una portada pero aquí está fruto de la suerte y de pensar un poco. La mejor cámara siempre está en nuestra cabeza.

Rockdelux nº279 Diciembre 2009.

lunes, 2 de noviembre de 2009



Fotógrafo es una profesión llena de mitos en la que casi todos son mentira. Hace poco he vuelto de un reportaje de viajes. Todos os acordáis en este momento de National Geographic y de los puentes de Madison, ¿verdad? Uno piensa que viajar para hacer un reportaje es maravilloso, muchos días esperando la luz más adecuada, investigando el entorno, aguardando a ese momento mágico para poder captarlo, sentarte en una esquina a la caza de que ocurra algo, esperar a que el tiempo cambie… Todo mentira. Siempre vas con el tiempo justo, corriendo a todos lados y viviendo como un vampiro inverso. Te levantas antes del amanecer para aprovechar los primeros rayos del sol, esa hora mágica. Corres en busca de la mejor foto y la mejor luz. Lo de desayunar, sólo si te queda un rato. A partir de ese momento empieza una yincana , corres de un sitio a otro, frenas en seco en una cuneta porque un rayo de sol ilumina el paisaje pero cuando desciendes el sol se oculta y se te cae el mundo encima. Disparas a todo lo que se mueve, no piensas, todo se puede re-encuadrar, corres contra la meteorología. Si el sol cae a plomo o diluvia tienes que sacar la foto,. Si no hay gente en la calle te la inventas, muchas veces siendo tu mismo fotógrafo y viandante. Y vas corriendo para que el sol no se ponga en el camino. Pero los fotógrafos somos obstinados e inventamos el trípode para poder sacar partido a la luz artificial y ganar casi un horita de luz. Bueno se me había pasado que lo de poder montar el trípode, colocar la cámara, medir luz y disparar como Dios manda una foto de paisaje durante el día es un mito. Así computamos unas 12 o catorce horas de currar sin parar, aunque la luz del mediodía sea nefasta. No paramos ni a comer, ese es un lujo sólo a mi alcance cuando hay mal tiempo, y ni eso. En este viaje el temporal fue tan brutal que me tuve que refugiar en el primer bar que vi. La suerte me hizo entrar en una tasca muy pintoresca donde acabé haciendo fotos a la comida para la guía gastronómica, al dueño del local mostrándome la cocina y cómo prepara sus platos. Una suerte, pero de parar, nada, todo hay que aprovecharlo. Y cuando cae la noche descargar el trabajo, etiquetarlo y a dormir donde te pille para sacar más partido al próximo día.

Pero no siempre es así, cuando trabajas por tu cuenta, gastándote tu propio dinero puedes trabajar como deberías. Lástima que eso ocurra poco a menudo. Hace poco hablando con un compañero en Barcelona me decía que para él la manera de hacer un retrato de un país tenían que ser tres meses: uno para introducirte y pensar en qué y cómo quieres sacar y el segundo para que se te encienda la bombilla y descubras lo que quieres hacer y hacerlo con calma. Me imagino que el tercer mes sería para completar y pulir el trabajo. Quizás no aspire a tanto pero a algo parecido sí, a tener tiempo para hacer las cosas.

martes, 13 de octubre de 2009

Alfredo Arias Vs. Anton Corbijn



Esta noche me veré las caras con todos vosotros en el Tuperware, en Madrid. Aprovecho el blog para comentar un par de detalles que no creo que pueda comentar durante la proyección.
¿Por qué elegir a Anton Corbijn como prologo? La verdad es que ya apenas me representa y menos me puede influir, actualmente estoy muy alejado de su concepción fotográfica. Hace años para mí era un referente absoluto pero de puro aburrido y repetitivo ya ha dejado de interesarme, aunque como director de cine en Control me ha llamado la atención. Antes era un tipo cabal, que sabía colocar a los grupos con muy pocas referencia y hacerlos girar a su alrededor sin apenas artificios, eso me encantaba. Sabía comunicar con el B/N, y hacía cosas realmente interesantes en color (esas fotos del Achtung Baby de U2). Pero todo esto era hace más de 15 años, ahora se repite, aburre y no se esfuerza lo más mínimo. Ya he hecho yo mismo 100 veces lo que el hacía, más de una vez me han llamado el Anton Corbijn español pero ya me canso. Me acerque a las grandes bandas del rock nacional pero eso solo me ha producido aburrimiento y desilusiones, los grupos son compendios de pequeños egos muy maleables dispuestos a partir una lanza por ti lo mismo que a partirte la cara si no les dices cosas bonitas. Los grupos no tienen esa capacidad de investigar, experimentar, conocer cosas nuevas e intentar trascender. Supongo que lo mismo le ocurrió a Anton con grandes dinosaurios como Metallica o Depeche Mode, monstruos tan grandes como inamovibles nada dispuestos a hacer algo distinto o hacer simplemente algo. Bandas como Sober, Hamlet o Mago de Oz, solistas como David de María o Pitingo acaban pecando en lo mismo, una pena.

Ahora ya no quiero ser el Anton Corbijn español, hace tiempo que se cruzaron otros grandes en mi camino, David Lachapelle me ha poseído con su color y sus mil maneras de romper la monotonía, ahora quiero su color, sus personajes rompiendo esquemas, haciéndote participe de una foto distinta que perdurara en el tiempo, quiero otros personajes, otras vivencias, más tiempo y más complicidad. Quiero los rostros de Rankin, las escenas de Ellen Von Numberg, la procacidad de Nan Goldin, la rapidez de Weegee, la delicadeza de Bruce Weber, quiero más cosas.
Llevo diez años haciendo fotos de música y es hora de cerrar un ciclo. Por eso a muchos os sorprenderá que no haya fotos de conciertos en esta proyección, ya las habéis visto muchas veces y cualquier truco nuevo que pueda realizar no será nuevo en 6 o u 8 meses. Ahora quiero mostrar otras cosas, mi visión personal de la vida y en B/N, y mis trabajos comerciales en color, solo retratos. Lo que actualmente me hace más feliz. Pasen y vean.

buenas intenciones



Este blog nace con una sola razón: dar salida a esas conversaciones e ideas que me rondan por la cabeza y no siempre plasmo como debería. Para poder enseñar fotos y contar como las hacemos, para romper esos mitos tan estereotipados de la profesión. Para Mostrar Que hay otras realidades posibles y poder contar día a día como veo la vida. Aquí vivirá una segunda vida mi proyecto personal en B/N “La foto del día”. Aquí espero encontrarme opiniones, tanto buenas como malas y un montón nuevas experiencias. Todo esto tiene una fecha de caducidad, al menos por el momento, hasta diciembre de 2010. Luego ya veremos. Bien venido.